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Higinio

Paco el pocero, lehendakari (5)

Tres meses después del último artículo y dedicado al mismo insigne señor que va éste, retomo esta bitácora tan asqueado como entonces con la tontería nacionalista. El motivo (ando algo retrasado en la lectura de prensa) me lo ha dado otra vez este señor (y su portavoz gubernamental) con las declaraciones que hizo recientemente ante 70 aniversario del bombardeo franquista de Guernica durante la guerra civil.

Son declaraciones que dan la medida de la estupidez que le embarga. Y puede tomarse como insulto, pero no lo es ni lo pretende: es una descripción objetiva y acaso médica. El individuo reclama un perdón a los vascos (y, supongo que en su línea veborreica, también a las vascas) por ese bombardeo que, claro está, sería hecho por españoles y de los cuales el máximo representante sería el jefe del gobierno, Zapatero. Este último tendrá todas las tonterías que se le puedan adjudicar, pero lo de máximo representante no parece: si el gobernante de los vascos y las vascas supiese de qué habla, se referiría al jefe del Estado, y ese es otro. Me temo que aquí la metedura de pata es mayor que la de aquél glorioso hermano de Miami metió al presentar a otro no menos glorioso (pero con bigote) gobernante español.

En fin, que el señor de Ajuria Enea y patrón de vascos y vascas, y que reci én ha pedido él perdón a las víctimas de ETA (y de los silencios de muchos vascos y vascas que tontean y animan el nacionalismo: léase urgentemente a Fernando Aramburu y su Los peces de la amargura), exige ahora a los españoles que le pidan perdón por lo de Guernica. De cómo la tontería y demagogia no repara en el ordenamiento jurídico han dado buena cuenta muchos comentaristas. Alguno como el profesor Antonio Rivera, en el Diario Vasco recuerdan que el tal señor es el representante del Estado en el País Vasco  [ http://www.diariovasco.com/prensa/20070427/opinion/pedir-perdon_20070427.html ].

Se me ocurre pensar (y pedir) que acaso no tardando mucho el señor de los vascos y las vascas deberá pedir perdón, al menos a Greenpace por las ballenas que los pescadores vascos vienen liquidando desde hace siglos y que tienen a la especie en peligro de extinción.

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