"Mas" enredos...
... de vocabulario.
Mas, el Artur Mas, el molt honorable en aqueste moment, acaba de sumarse al gremio de los creadores de lenguaje, de abonarse al giro lingüístico.
Lo de "país" ya está aceptado. Es un término geográfico que en política es ambivalente aunque suele hacerse sinónimo de "estado" o, incluso mejor "nación", en la medida que este término es más inclusivo de "la gente" y también equivale a "estado".
Hacer país, es decir, construir la nación... valga marcar un territorio como cualquier otro animal, meando incluso; o segregando mal olor, como las mofetas. No sé muy bien cómo encaja eso de "hacer país" con la artificialidad asignada al "Estado".
Debería suponerse que la nación "es" o "está" como algo natural. Como natural es el "país": una geografía, un paisaje del que uno se empaña, al que uno vuelve para disfrutar de recuerdos... y que suele identificar también (esto ya no es geográfico) con unas relaciones personales que adoban los sentimientos estéticos generados por ese paisaje.
Debería suponerse, sí, pero cuando se trata de "fer pais" no se quiere asumir su artificialidad. Es como si fuese una función fisiológica más. Y no me atrevo a señalar cuáles se me ocurren para ejemplificarlo.
Hacer patria en vez de hacer país, me decía a mi cuando universitario un profesor de Historia Medieval aficionado al alcohol (y nunca lo vi tomar sidra asturiana) más de la cuenta, justificaba alguna ausencia a clase para cantar tonada (o en un ochote, no recuerdo bien). Solemne tontería porque ni tan siquiera como historiador (profesor aspirante a cátedra, fue, heredando apellido sobre todo...) hizo tal cosa y lo desbordaron otros más hábiles, aunque igual de nacionaliegos o más.
En fin. Los Estados son una construcción artificial, dice el honorable. Ya. Como cualquier cosa humana. Cualquier cosa no fisiológica, claro. Aunque si hablamos de "plenitud nacional"... no sé, se me ocurre también que podría llegar a ser un orgasmo...
0 comentarios